4° TOP de Santiago condena a presidio perpetuo calificado a autor de robos, abuso sexual y violación

30 abril 2021

El Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó hoy –viernes 30 de abril– a Mario Enrique Silva Moya a la pena de presidio perpetuo calificado, en calidad de autor los delitos consumados de robo con intimidación (siete), dos robos con intimidación en concurso real con abuso sexual y cuatro robos con violación. Ilícitos perpetrados entre enero y marzo de 2019, en diversas comuna de la ciudad.

En fallo unánime (causa rol 16-2021) el tribunal –integrado por las magistradas Carolina Cox Escandón (presidenta), Laura Assef Monsalve y Paulina Sariego Egnem (redactora)– aplicó, además, a Silva Moya las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos por el tiempo de vida del condenado, más la sujeción a la vigilancia de la autoridad por el término de 20 años.

Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.

Hechos acreditados
El tribunal dio por acreditados, más allá de toda duda razonable, que aproximadamente a las 17 hora del 13 de enero de 2019, Silva Moya abordó a las víctimas E.A.G.M. y A.F.C.C. de 16 y 17 años respectivamente, cuando caminaban por avenida Matta al poniente, en la comuna de Santiago, les preguntó por una dirección y, posteriormente, exhibiéndoles un cuchillo, les exigió la entrega de sus pertenencias, pasándole las víctimas sus teléfonos celulares y dinero en efectivo, tras lo cual el acusado se dio a la fuga.

Dos días después, alrededor de las 17.30 horas, el sentenciado se acercó a las víctimas G.A.A.R. y R.C.M.M. de 14 y 15 años de edad, respectivamente cuando transitaban por avenida El Llano Subercaseaux, a quienes preguntó cómo llegar a Estación Central, luego les mostró un cuchillo que tenía en el cinto y les exigió sus pertenencias, entregando las víctimas dos teléfonos celulares y una cadena de plástico plateado, especies con que huyó del lugar.

En tanto, alrededor de las 17 horas del 18 de enero de 2019, el acusado se aproximó a la joven V.J.A.C., de 19 años de edad, y a su amigo B.L.F.V.G., de 15 años, en las inmediaciones del Parque Bicentenario, comuna de Vitacura, a quienes preguntó por otra dirección, para luego exigirles algo de valor; entregando el adolescente V.J.A.C. la suma de $2.000. Acto seguido, Silva Moya les mostró un cuchillo y los condujo por la avenida Presidente Riesco, al norte, hasta el río Mapocho, lugar donde obligó a la muchacha a realizarle actos de connotación sexual, bajo amenaza de muerte a su acompañante. Luego, llevó a la pareja hasta la Rotonda Pérez Zujovic, donde les sustrajo los teléfonos celulares y el dinero que portaban, aproximadamente $15.000 en efectivo, antes de huir del lugar.

Una semana después, el 25 de enero de 2019, alrededor de las cuatro de la tarde, Silva Moya abordó a la adolescente C.A.F.M. y al joven W.J.A.C., de 16 y 14 años de edad, respectivamente, en una plaza cercana al Parque O´Higgins, en la comuna de Santiago. Lugar donde les exhibió un cuchillo, señalando que, además, mantenía una pistola en la mochila que portaba, exigiendo sus teléfonos celulares y registrando los bolsos de los jóvenes. Luego, obligó a los adolescentes a acompañarlo hasta otro parque, ubicado cerca de la calle Viel, donde violó bucalmente a la menor, mientras mantenía bajo constante amenaza al joven. Proceder que reiteró en otras dos ocasiones, conduciendo a las víctimas hasta calle Obispo Edwards con Domeyko y luego hasta el Parque Centenario, exigiéndole finalmente a W.J.A.C. la entrega de sus zapatillas, antes de huir del lugar.

El siguiente ataque se registró el 31 de enero de 2019, día que, alrededor de las 20 horas, Silva Moya abordó a las adolescentes C.C.V.C y M.S.V.A., ambas de 15 años de edad, mientras se encontraban en el Parque Balmaceda, cerca de la estación Baquedano del Metro, sentándose junto a las menores y preguntándoles cuánto faltaba para llegar a Maipú. Luego las intimidó con un cuchillo que mantenía en la cintura, obligándolas a caminar para meterse entre unos arbustos del parque, lugar donde procedió a robarles sus teléfonos móviles y el dinero que portaban. Antes de huir con las especies y dinero, Silva Moya abusó sexualmente de ambas niñas.

Al día siguiente, alrededor de las 16 horas, el condenado volvió a atacar a una pareja de adolescentes. En esta ocasión,  a la menor B.M.G.S. de 15 años, y a su amigo L. J.S.M., 17, cuando se encontraban  conversando en el bandejón central de la Alameda, a la altura de calle José Miguel Carrera, comuna de Santiago. Silva Moya repitió el sentarse al lado de las víctimas, preguntarles cuánto faltaba para llegar a algún lado, para pasar a intimidarlos mostrándoles el interior de la mochila que portaba, la cual, aparentemente, contenía un arma de fuego y cuchillos, obligando a los jóvenes a seguirlo por calle José Miguel Carrera al sur. Al llegar a la altura de calle Claudio Gay, les exigió los chips de sus celulares. Luego, los llevó hasta un edificio cercano al ingreso a Fantasilandia, lugar donde, entre unos matorrales, procedió a violentar sexualmente a la niña; mientras amenazaba a su amigo. Finalmente, Silva Moya subió a un microbús, llevándose los teléfonos celulares sustraídos.

En tanto, el 2 de febrero de 2019, a las 18 horas aproximadamente, Silva Moya abordó a la B.P.O., de 17 años de edad, cuando caminaba por calle Arturo Prat, en la comuna de Santiago, a quien le solicitó dinero, exhibiendo un cuchillo que mantenía en el bolsillo del pantalón, arrebatándole una mochila que portaba, la cual contenía un pantalón, un par de audífonos, un cargador de celular, una tarjeta bip, un reloj y un teléfono celular, al que le sacó el chip.

Luego y bajo amenazas, obligó a la víctima a acompañarlo a la intersección de San Diego con avenida Matta, donde le exigió que lo ayudara a robar otro teléfono celular a una transeúnte, lo que no lograron por la resistencia de la víctima elegida, por lo que caminaron hasta la intersección de avenida Matta con Nataniel Cox, donde el acusado abordó un microbús.

En la tarde del día siguiente, alrededor de las 19 horas, Mario Enrique Silva Moya se aproximó a la menor de 15 años A.F.V.C. y a su amigo B.A.L.H. de 14, a quienes encontró a la salida de la estación del Metro Salvador, comuna de Providencia. Se acercó a los menores y les preguntó cuánto demoraría en llegar a Maipú. Luego les dijo que le tomaran el peso de su mochila, diciéndoles que en el interior mantenía armas y les exhibió un cuchillo que mantenía en el cinto del pantalón, obligando a las víctimas a acompañarlo hasta un jardín, donde les exigió la entrega de sus pertenencias, sustrayéndoles dinero en efectivo, un celular, audífonos y un reloj. Luego, descargó una película pornográfica en un celular, realizó actos de connotación sexual y violó bucalmente a la menor, tras lo cual huyó con el dinero y las especies sustraídas.

Asimismo, a las cuatro de la tarde del 4 de febrero de 2019, Silva Moya abordó a la adolescente J.F.P.D. y a su acompañante M.J.G.C., ambos de 16 años de edad, en una plaza ubicada frente al Hospital Exequiel González Cortés, comuna de San Miguel, a quienes contó “que había venido a ver a una amiga al hospital que se encontraba herida a bala”, para luego agregar que él había estado preso en muchas cárceles y que no tenía problemas en matar, mostrándoles cicatrices de cortes en sus brazos para, posteriormente, extraer de la mochila que portaba, la hoja de un cuchillo, asegurando “que en la mochila también mantenía armas de fuego”.

Bajo amenazas de muerte, condujo a las víctimas hasta un callejón, ubicado a un costado de la Autopista del Sol, en el límite de las comunas de Santiago y Pedro Aguirre Cerda, donde les exigió la entrega de sus teléfonos y el dinero que portaban. En lugar, además, amenazó al joven M.J.G.C. y violó bucalmente a la menor, tras lo cual se dio a la fuga con las especies y el dinero sustraído.

Al día siguiente, en horas de la tarde, Silva Moya se acercó a A.D.H. de 17 años de edad, cuando el caminaba por la avenida Libertador Bernardo O´Higgins a la altura del Metro República, a quien preguntó dónde quedaba el mall Costanera Center, respondiéndole la víctima que debía seguir caminando al oriente. Luego, cuando caminaba a la altura de la estación Los Héroes, la víctima fue abordada nuevamente por Silva Moya, quien le exhibió un cuchillo y le exigió la entrega de “algo para vender”, conminándolo a entregar su iPhone, modelo X. Especie con la que el condenado se dio a la fuga.

Días después, el 13 de febrero de 2019, alrededor de las 19 horas, Silva Moya siguió a B.O.P.R., de 16 años, en calle Grajales, comuna de Santiago. Al llegar a la intersección con la avenida España, el acusado le dijo a la víctima que, si arrancaba, le pegaría un balazo o una puñalada, exhibiéndole un cuchillo y exigiéndole la entrega de especies de valor, sustrayéndole el celular teléfono. Móvil que el acusado utilizó para ver pornografía, material que también obligó a ver a la víctima. Luego obligó al joven a entrar a un pasaje sin salida en Avenida España, mientras Silva Moya se alejaba en otra dirección con el celular, unos cigarros y $3.000 de propiedad de B.O.P.R.

Modus operandi que reiteró una vez más, alrededor de las 16.30 horas del 15 de febrero de 2019, al acercarse a la víctima E.P.B. cuando caminaba por calle Alférez Real, comuna de Providencia. Al llegar al parque Inés de Suárez, le preguntó cómo llegar a Cantagallo, para rápidamente decirle: “no te va a pasar nada, pero tengo un cuchillo y una pistola”, mostrándole un arma blanca que llevaba en la cintura. Con la víctima intimidada, la llevó caminando por Alférez Real y luego por calle Pocuro, trayecto en el que le exigió la entrega de especies de valor, bajo amenazas permanentes. Al llegar a la calle Ricardo Lyon, el sentenciado le sustrajo diversas especies, entre ellas un teléfono celular, aparato que uso para ver una película pornográfica. La víctima aprovechó un descuido para correr y subirse a un auto que transitaba por el lugar, tras lo cual Silva Moya huyó del lugar.

Finalmente, el 5 de marzo de 2019, a las 22.20 horas aproximadamente, el acusado abordó a N.A.T.C. de 16 años de edad, en calle De Las Claras al llegar a la intersección con María Luisa Santander, comuna de Providencia, a quien amenazó y arrebató su teléfono celular, antes de escapar. Ver fallo

Fuente: PoderJudicialdeChile